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sábado, 17 de diciembre de 2011

JUÁN CARLOS HURTADO ATHOS Y SU BLOG "30 AÑOS DE UNA GRAN PASIÓN". BUEN RESEÑADOR.

Juán Carlos
Hurtado Athos
Creo que hemos mantenido una cordial relación a través del correo con este singular locutor. No pertenece a nuestra época y tampoco estamos en su onda. No quiero que parezca esto una discriminación. Sencillamente que no hablamos el mismo idioma de gustos musicales y otros pareceres. Sin embargo, leyendo su blog "30 Años de una gran pasión", quedo convencido que se trata de un colega que ama lo que nosotros: la radio. El comunicarse con los demás y sin prejuicios ni banalidades. "Un señor locutor" Otra cosa. Mentiría que lo he escuchado y que me agrada su estilo y voz. No podría haber intentado reseñarlo. 

El juvenil Juán Carlos
Es lo que dice él. Me encanta cuando comenta sus inicios. Tiene su estilo y me lo imagino emocionado frente al teclado, escribe que te escribe, sin pestañear ni pensar en que las horas pasan volando. Sus recuerdos que improvisaba un estudio radial en su dormitorio y empezaba a girar las "tornamesas" y frente al micrófono, con su inventiva imaginaria, empezaba a comentar y catalogar los éxitos del momento. Su historia juvenil para ingresar a Radio Atalaya. Cuando esta emisora funcionaba en Huaraz de Pueblo Libre. Se había convocado un concurso para nuevas voces y el límite empezaba con mayores de 18 años. 

Plácido con sus trofeos
Él, tan sólo estaba en los 14. Época del rock, de todas maneras, o de los ritmos de moda de esos tiempos. Ya era un "experto". Tenía su propio estudio y aunque todavía utilizaba el uniforme escolar, se consideraba un Disc Jockey y con mucha sabiduría. Aceptó el reto y se presentó al concurso.  Muy "vivo", dejó que otros participaran primero y los fue midiendo. Cuenta que observó a los otros tremenda mente nerviosos y que se habían ayudado de papelitos con datos. Él, no los necesitaba. Todo lo tenía en su PC mental. Le dieron la ocasión y, como se dice ahora, "se mandó con todo". 

No conozco a la niña
Un señor Rafael Ortega le dijo que esperara su llamada. Ya me lo imagino. Tenso y entusiasta. Con el tiempo que no corre y la angustia de conocer el resultado. Hasta que sonó el teléfono un día a las 2 de la tarde y fue citado a grabar el ranking de Radio Atalaya. En efecto, se preparó y concurrió al estudio "de verdad" y con su voz chillona y todavía infantil, grabó con toda la fuerza que su emoción y voluntad, para lograr un triunfo, se lo pedían. Le comunicaron entonces y esto era prueba de que lo aceptaban, diciéndole que iría al aire el último domingo de Setiembre. Llamó a medio mundo y especialmente a sus amigos del colegio. 

Piero Roncallo, él, Annie Arias,
Hugo Díaz y Mario Jiménez.
Se convirtió en "famoso" y ya podrán imaginarse lo feliz que se sentía. Todo ufano, veía que sus sueños se hacían reales y un futuro prometedor lo esperaba. Esta es la reseña de Juán Carlos Hurtado Athos, a quien felicito y admiro por esa vocación. Vendrían luego Miraflores y alternaría con Llamosas, Flores y Roncallo. este último sobreviviente de una gran generación de locutores y que me felicitara cuando, en historia similar a la de Juán Carlos, tuve oportunidad en su radio. Es un apasionado de la locución y evoca a Randy Calandra, Mario Jiménez, Annie Arias, Piero Roncallo y Hugo Díaz, entre otros, como colegas de su primera etapa. 

¡Feliz en su salsa!
Debo confesar que se me ocurrió tratar a este buen colega, menos viejo que yo, leyendo y oyendo en Facebook una invitación que hace él para oír "Zeta Rock & Pop" y donde se invita a escuchar las voces de los comentaristas radiales muy famosos de su época. No reconocí a ninguno porque, repito, jamás los había oído. Somos dos mundos distintos. Pertenecemos a lo clásico, lo criollo y lo romántico consabido. Pero, ese es su lugar y respeto y aplaudo su entrega. Ojalá que le agrade a JUÁN CARLOS HURTADO ATHOS y se sienta bien recibido en este blog que estamos dedicando a los "Locutores en el Perú". Agradecido por habernos permitido utilizar sus fotos y a seguir apoyando a la Asociación del Locutores del Perú que preside nuestra amiga querida Rosita Lozano Portocarrero. Gracias.


domingo, 11 de diciembre de 2011

LOS RADIO OPERADORES. EVOCANDO A SAMUEL SOTO MARIUS EN "VICTORIA" Y A JORGE "COCO" SALAS EN "RADIO LUZ".


El joven Serván, el operador Soto Marius, el gran
José Lázaro Tello y Carlos Alfonso Delgado.
En toda emisora y responsable de que nuestras voces se oigan bien, son los operadores de audio. En Radio Victoria recuerdo a Samuel Soto Marious, que ingresaba a las 7 de la mañana para darnos pase a Alberto Arenas y yo en el Radioperiódico "El Mundo". Después continuaría con los radioteatros y finalizaba en el auditorio con "Los Embajadores Criollos" y otros. Nos hicimos amigos y fuimos cómplices en varias bromas que gastamos a nuestros colegas. Se sabía todos los números telefónicos de la radio. Por ejemplo, gracias a él, llamamos a José Lázaro Tello desde el fono de Redacción al Control y anexo de Locución.

El juvenil locutor
Le hizo una seña a José Lázaro y este acudió a recibir la llamada. Desde nuestro "lugar de bromas", imitando la voz del Sr. Cavero, lo invitamos a acercarse a su oficina. Esta parejita advirtió como el negro Tello, casi como eyectado por un resorte, se levantó, salió de la cabina y se dirigió a la oficina de Cavero. Nosotros, Samuel y yo, observábamos todo. Toca la puerta de la Gerencia, saluda y se pone a sus órdenes. La reacción del dueño de la radio fue instantánea. ¡Maldita sea, oiga! ¡Nadie lo ha llamado! ¡Vaya a su hueco! Es que Sr. Cavero, yo recibí su llamada, dijo Tello. ¡Vaya hombre, que tiene que dar la hora! Y se retiraba,

Don José Edo. Cavero
La verdad es que Samuel, tan muchacho como yo y conocedor de las reacciones de muchos colegas y en especial del Sr. Cavero, se las ingeniaba para comprometernos. Nunca advertí sospecha alguna en Tello sobre mi. El resultado de aquella broma, no fue tan simpático. Lo lamenté porque José Lázaro, todo un señor, fue mi maestro en lo que significaba introducirnos en el criollismo, aquel que se vivía en vivo y en directo y con jarana y todo. Hoy evoco a Samuel Soto, porque fue el primer operador que conocí. Fuimos muy amigos, renunció a la radio y continuaríamos siéndolo mucho tiempo después, ya fuera de ella. (Gracias a esta evocación recibimos una llamada telefónica de Pía Soto Cannata, su hija, a quien agradecemos su invitación de vernos. Ella radica en los Estados Unidos).

Jorge "Coco" Salas
"El Mago de las
Perillas"
Otro Radio operador que evoco con afecto es Jorge Salas a quien conocí en la desaparecida Radio Luz del Padre Gonzalo Alcocer y yo bauticé como "el Mago de las Perillas". Eran los años 60 del siglo pasado. Realizábamos una programación especial con música italiana, española e internacional. El ambiente de una cabina de locución y el control, se limita a los dos. Hay una soledad difícil de superar. Sin embargo "Coco Salas", se las ingeniaba para alimentarnos de optimismo y sonreía ante nuestras ocurrencias frente al micrófono. Verlo así, era un estímulo a nuestro trabajo. Nos hicimos grandes amigos.

Todo locutor, como siempre lo comento con Eduardo Navarro a través del teléfono, ha tenido que pisar por diferentes tiendas. Había que buscárselas. Así llegué a Radio Luz y evoco anécdotas con Jorge Salas. Era tanta la confianza entre nosotros y las bromas que nos hacíamos, que aún recuerdo aquella vez y refiriéndose al "Banco de Dios", programa de ayuda a los necesitados que dirigía Gonzalo Alcocer, me preguntó si  nosotros éramos pobres o ricos. Le respondí siempre en broma que lo primero. El "mago" replicó: entonces podemos acudir al Banco de Dios. Le dije, eso es para los oyentes de la radio. No, arguyó. ¡Nosotros somos pobres y vamos a pedirle ayuda al "Banco de Dios".

En efecto, en la radio había un buzón para las cartas, una especie de cajón de cierta altura y que estaba ubicado en la puerta de entrada. En momentos que todos los demás salían a almorzar, el "mago" con mi complicidad, ponía de cabeza el "buzón", revisaba algunos sobres y si los encontraba algo llenitos, los separaba. Volvía a sellar el artefacto y, "si ligaba", participábamos a medias del óbolo. Gracias a "este regalo de Dios", disfrutábamos de un rico "cau cau", picantito y sus panes calientes en una caserita de "Coco" en el mercado de la Aurora. Ocurrencias de mi gran amigo Jorge Salas y este su cómplice. Aclaro que no volvimos a repetir esa experiencia más de una vez. "Es que éramos pobres". Remembranzas que me han permitido evocar a dos grandes amigos de "las perillas" tan bromistas como yo. ¡Que Dios nos perdone! Gracias.

Atención: Esta reseña ha sido transcrita desde nuestro blog "Remembranzas" y que tiene como objetivo evocar a los "Radio operadores", personajes muy importantes en la labor del locutor. Fue publicada el 3 de Octubre de 2011. Nuestro homenaje a ellos en "El Día del Locutor".